La verdad sea dicha. Cuando conversas con alguien sobre el tema, te das cuenta de que las españolas tendemos a pensar que somos uno de los países con más estilo. Pero ojo. No nos equivoquemos. ¿A que nos estamos refiriendo en realidad, al afirmar esto? A que cuando visitamos blogs de moda del todo el mundo nos damos cuenta que el estilo español tiene un denominador común y es la uniformidad que hay. Me explico: no sólo somos bastante poco originales, sino que además nos encanta serlo. Vestimos bien. De niñas bien. Todos parecido, amamos las normas. Rara vez encontraremos la típica/o adolescente (no tan típica/o en España) rebelde, con ganas de comerse el mundo y de ser creativa, diferente y original, e intentando canalizar sus sentimientos de frustación y rabia contra el mundo a través de su ropa.
Lo que pasa es que aquí todos vamos a lo mismo. Vestimos igual. Nos encanta lo elegante, lo decente y bien cuidadito, hasta el último detalle. Nos encanta verlo en los blogs, en las revistas, nos encanta que la Vogue nos diga qué vestir esta temporada y cómo hacerlo. Soñamos despiertas con asistir a la Semana de la moda de Madrid o Barcelona y creernos importantes.
Si tienes la mente mínimamente abierta, y si has viajado un poco (¡sólo un poco es suficiente!) por estos mundo de Dios te habrás dado cuenta de que en otros países la cosa ya no funciona exactamente así.
Los países nórdicos nos llevan años de ventaja (si es la primera vez que oyes esto, háztelo mirar) en cuestión de libertad de expresión en el estilo (por supuesto, también América, pero ese ya es otro tema porque allí la gente está zumbada y visten acorde a sus múltiples trastornos).
El problema aquí en España reside principalmente en la escasa libertad de expresión que tenemos. Si no vas como todo el mundo, te van a mirar mal. Prepárate para que la gente en la calle, con nula educación -ni se molestan en disimular, tampoco- se gire, te escanee de arriba a abajo y cuchichee con su compañero sobre lo poco convencional que vas. ¡Prepárate para que te etiqueten en cuanto posen sobre ti su mirada etiquetadora! Prepárate para las críticas y para que se te considere un 'bicho raro'. Y es que a veces unimos la palabra estilo a moda, y no es así, se puede tener estilo sin seguir la moda, simplemente poniendo en funcionamiento tu cabecita pensante, intentando jugar con la ropa, que al fin y al cabo es sólo una forma más de expresión. El estilo es para la gente con carisma, actitud y que siente lo que lleva, para aquellos que lo usan como reflejo de su personalidad. Queda muy poético y suena a topicazo, pero así es. Sin más.
En Suiza y Alemania abundan las tiendas de segunda mano, las hay más caras, más baratas, extravagantes, para auténticos freaks y para fashion victims. Las hay con la ropa de la abuela, y también de bolsitos viejos de Dior y vestidos de Valentino a un precio bastante más razonable que cuando fueron comprados por primera vez. La ventaja añadida de estas tiendas es que además puedes venderles tu ropa ya usada y que, reconozcámoslo, ya no quieres ni ver porque ese modelito no parecía tan sumamente hortera cuando lo compraste, ¿verdad?
No hace falta tener mucho dinero para tener estilo ni tener un armario de proporciones gigantescas donde guardar kilómetros de tela, sino desarrollar el sentido del gusto y abrir la mente más allá de lo que vemos día a día en la calle, lo cual es bastante difícil ya que los seres humanos somos seres sumamente influenciables, pero en fin, poco a poco.
Algunos ejemplos de moda extranjera geniales los podemos encontar en blogs como http://www.hel-looks.com/ , un blog sobre la moda de la calle en Helsinki, Finlandia que nada tiene que ver con lo que estamos acostumbrados aquí.
La idea no es copiar a estos países, está claro, sino darnos cuenta de que nos podemos salir de los márgenes y que no pasa nada.
Scott Schuman desde su blog http://www.thesartorialist.com/ nos puede ayudar. Fotografía gente real con moda real de los lugares más importantes del mundo.
La página web de referencia internacional http://www.vice.com/es es un comienzo para ver un nuevo enfoque de la moda, y bueno...de la vida en general.
Marcas como American Apparel nos muestran otro ángulo de lo que se supone que es in ahora en América pero a la vez diferente: http://store.americanapparel.eu/denim12.html
Los festivales de música de fuera (¡sí, también tienen festivales de música! Y están bastante más currados que los españoles, a excepción de un par) son una fuente constante de inspiración y el reflejo de un estilo de vida: el de Glastonbury en Inglaterra, o el de Coachella, en California, son dos de los más famosos del panorama internacional aunque hay algo así como mil más e igual de buenos pero menos conocidos.
xx.
Me he encantado éste post. Tienes una nueva seguidora wapa. Te lo has ganado.
ResponderEliminarSi quieres seguirme estaré encantada.
Besitos y buenas noches wapa