¿Lujo o vicio?, ¿ Calidad o capricho?

* Imagen extraída de la página web oficial del revolucionario graffitero Zevs, que está en contra de la imagen y de las marcas, para ver más, visita su pág. web: gzzglz.com , pincha encima.

¿Exclusividad o Gilipollez?

Bien, es un tema que siempre he querido tratar aquí. Se trata de las masas, de cómo nos manipulan, nos venden sus productos y compramos. Las multinacionales siempre consiguen lo que quieren. Compra Chanel, es elegancia. Y vas y compras Chanel, y ya te sientes más elegante.

Compras Lanvin y te crees importante. Un vestido de Dior, ¿te puede dar la felicidad? A lo mejor sí, entonces qué pasa, pues que creemos que compramos felicidad. Cachitos de felicidad.

¿Hasta que punto podemos seguir así? ¿Cuánto es el máximo que se debería poder pagar por un par de Louboutins? ¿Cuánto estamos dispuestos a pagar? ¿Cuánto dinero le cuesta a Chanel hacer un par de botas, y cuánto salen ganando en beneficio? ¿Cuánto es lo máximo que se ha pagado por un bolso de Louis Vuitton? ¿Realmente estamos hablando de calidad, de lujo, exclusividad, poder o de manipulación, idiotez, sumisión y opresión?

Aveces creo que nos movemos en masa, como ovejas yendo hacia el corral. Hacemos todos lo mismo, como borreguitos y nada ni nadie se para a pensar el porqué. Se podría llamar instinto caprichoso. ¿?

Las marcas son inmorales, sin embargo eso poco nos importa. Un niño podría comer con un sólo zapato de Lavin, eso sí, de una edición limitada, durante toda su vida.
¿Donde está el límite? ¿Lo ponemos nosotros, los consumidores, o lo ponen ellos, las grandes empresas?

¿Donde acabará esto? ¿Acabará?

¿Realmente queremos que acabe?

Yo no estoy segura ni de mi propia postura al respecto.

Hay otro artículo muy bueno de un blog, llamado Style on the street, para verlo pincha aquí.